Y yo que pensaba que con el cambio de cafetería iban a dejar de aparecer anécdotas laborales... Ayer, sin ir más lejos, se me acerca un chico a la barra y me dice: -Perdona, una mosca me ha chocado dos veces contra la cabeza- y la verdad es que, aunque ahora sea la encargada, no supe que decirle. Te lo enseña Me Coments